1-Antes de comprar

Lo primero es lo primero, no empieces a ponerte un vestido hasta que hayas confirmado algunos detalles técnicos: ¿en qué época del año se llevará a cabo la boda? ¿Dónde se celebrará la ceremonia? Esto evitará que te enamores de un vestido que no se adapte a tu boda. Es decir, un vestido de gala para una ceremonia civil, un vestido sin tirantes y muy corto para una boda en invierno… Ok, ya tienes la idea!

2-Desarrolla tu idea

Busca diferentes vestidos para encontrar el estilo que más te guste, puede que al principio te guste un estilo concreto pero dia a día pueden variar tus gustos de tanto mirar y buscar. Es posible que una vez que hayas terminado cambies de opinión por completo…

3-Presupuesto

Antes de salir de compras es importante que tengas un presupuesto en mente. ¿Tienes 500€ para gastar? ¿o 5.000€? De esa manera no te enamorarás de un vestido que simplemente no puedes permitirte. ¡Es importante encontrar un vestido que adores, pero también es importante no arruinar tu presupuesto antes de que incluso hayas comenzado!

4-Sobre la cita

La mayoría de las boutiques de novias requieren cita previa. Pero una vez que estés en la boutique el personal de ventas te hará algunas preguntas generales sobre tu boda. Llega con una idea de lo que te gusta y lo más probable es que te traigan vestidos para probarte, serán tallas de muestra, así que no te preocupes si son demasiado grandes o demasiado pequeños, es sólo para darte una idea de cómo se verá cada estilo en ti.

5-En la tienda

Comprar tu vestido es una ocasión especial, así que trátalo como tal. Lleva a alguien contigo que lo disfrute tanto como tú: tu madre, una hermana, o quizás una amiga… Tómate tu tiempo y disfruta. Pero no lleves a mucha gente ya que muchas opiniones pueden hacer más daño que bien.

6-Piensa en los aspectos prácticos

Tu boda será un día muy activo, entonces si crees que has encontrado El Vestido haz algunas pruebas. Siéntate, ponte de pie, intenta levantar los brazos como si fueras a bailar y asegúrate de estar cómoda.

Sé tú misma, eso es lo más importante. Durante tu boda se trata de cómo te sientes, si te sientes feliz y guapa todos los demás te verán de esa manera.

7-Una vez hayas elegido tu vestido

Cuando hayas decidido qué vestido quieres te tomarán las medidas. La mayoría de las tiendas requieren un depósito y el resto lo pagas después del ajuste final. No te desesperes si cuando vayas por el primer ajuste el vestido no te queda como imaginaste. En esta etapa aún debe haber suficiente tiempo para ajustarlo y modificarlo. Este es el momento de darte cuenta de cualquier problema que puedas haber pasado por alto durante la emoción de elegirlo. Confía en la costurera para hacer su trabajo y mantén una actitud positiva.

8-Alteraciones

El segundo ajuste generalmente te dará una mejor indicación de cómo lucirá tu vestido el día de tu boda. Puede que todavía necesite un poco de ajuste, pero no mucho. Si es necesario realizar más cambios asegúrate de reservar otra cita antes de la boda para comprobar que todo sea como debe ser y que te quede como un guante. Es una buena idea llevar a una amiga que estará contigo el día de la boda para que sepa luego cómo funcionan los lazos, ganchos o botones.

9-Y llega el gran día

Recuerda dejar que su vestido respire antes de ponértelo, asegurándote de que esté colgado en altura, sin molestias y sin arrugas. ¡No querrás que se manche o arrugue antes de que incluso hayas tenido la oportunidad de ponértelo! Luego, disfruta el proceso de ponértelo, este es un momento especial que recordarás para siempre!

Siéntete guapa y disfruta de uno de los días más importantes de tu vida!